Freelance developer: las oportunidades

El trabajo del web developer es uno de los que mejor se prestan a una carrera como freelance. De hecho, se puede realizar desde cualquier lugar, siempre que tengas un ordenador y una conexión a internet. 

Ser un freelance developer significa simplemente ocuparse de diferentes proyectos para varios clientes, en lugar de tener un contrato fijo para una empresa. Precisamente esta independencia hace que la perspectiva sea tentadora a los ojos de muchos. Sin embargo, con una mayor libertad se ve contrarrestada por una falta de estabilidad y una serie de otros inconvenientes que no deben subestimarse. Analicemos ahora las ventajas y las desventajas de convertirse en freelance developer, para entender si el camino de los autónomos es el adecuado para ti.

Las ventajas de la carrera de freelance developer

Como hemos anticipado, la principal ventaja que acompaña a la carrera de freelance developer es sin duda tener una mayor dependencia. Los freelancer pueden trabajar desde donde quieran, sin obligación de ir a la oficina todos los días, incluso viviendo en el extranjero o viajando como nómadas digitales. Siempre y cuando cumplas con los plazos, tienen también la posibilidad de elegir sus propios horarios para adaptarlos al estilo de vida que se prefiera tener.

Sin un contrato con un sueldo fijo, quien se convierte en programador freelance podrá establecer sus propias tarifas como mejor crea. Otra ventaja es la libertad de seleccionar los proyectos que son más interesantes. No se está obligado a seguir las tareas encomendadas por parte de un empleador en una sola empresa. Esto significa también que, en la mayor parte de los casos, se está en grado de elegir las tecnologías, los lenguajes y los framework preferidos, sin tener que adaptarse a las rígidas normas empresariales. Sin embargo, está bien recordar que, teniendo que trabajar con clientes, la libertad no será nunca total. Es posible que deba estar localizable por correo electrónico durante el horario de oficina o estar presente en reuniones online con un equipo asignado al proyecto. También la posibilidad de establecer los propios precios está limitada por el budget que los clientes estén dispuestos a pagar.

Las desventajas de una carrera como freelance developer

Aunque se sobrevalore la vida de los freelancer, elegir convertirse en autónomos tiene también unas desventajas que no podemos olvidar.

Primero de todo, se tiene que tener en cuenta las horas de trabajo extra no remuneradas por tareas de administración, contabilidad y marketing. También es necesario abrir una cuenta como autónomos, con toda la burocracia y los costes que conlleva. De hecho, como autónomos se es responsable en primera persona de pagar los impuestos y contribuciones, que para los empleados sin embargo corre a cargo de la empresa.

Trabajando como freelance developer se renuncia también al sueldo fijo. Las entradas de los autónomos a menudo son más irregulares, con meses bastante bien remunerados y otros donde se gana mucho menos. Planificar las entradas, crear un budget y administrar las propias finanzas se vuelve más complicado. Aún no estando ligados de manera estable a ningún empleador, colaborar con diferentes clientes en algunos casos multiplica las molestias dado que se hay que tener en cuenta las necesidades y peticiones de cada uno.

Por último, la otra cara de la moneda cuando se trata de una mayor independencia es la ausencia de un equipo con el que se pueda contar.

No tendrás a nadie a quien pedir consejo, ayuda o con quien hablar pero tampoco habrá momentos de socialización que conviertan más agradable la vida en la oficina.

¿Cuáles son las habilidades que tiene que tener un freelance developer?

Ahora que hemos citado las principales ventajas y desventajas de la carrera de freelance developer, veámos que habilidades sirven para arrancar con éxito. Se entiende que un programador web tiene que conocer los lenguajes y las herramientas necesarias para crear un sitio web, que puede aprender a través de un bootcamp como Hackademy de aulab. Tendrá que ser capaz de administrar un proyecto de manera independiente. Esto incluye una cuidadosa planificación de presupuestos y plazos, una buena organización para cumplir los plazos, y la capacidad de efectuar actualizaciones y manutenciones para mantener a los clientes después de haber completado el sitio.

Además del trabajo de programación real, los autónomos tienen que ser capaces de ocuparse de la administración y la contabilidad de base, incluida la facturación y registro exacto de las entradas y las salidas.

Para promover los propios servicios y encontrar nuevos clientes será también necesario que el freelance developer sepa desarrollar algunas actividades de marketing. Tendrá que crear un sitio web personal, publicar en las redes sociales, dedicarse al networking, además de consultar plataformas para freelancer y responder a los anuncios más interesantes. Para convencer a los clientes tiene que saber escribir una propuesta convincente y ser capaces de negociar, evidenciando los puntos de fuerza.

Por último, es fundamental que los autónomos estén dedicados a la gestión de las finanzas personales, para hacer frente a las ya mencionadas diferencias mensuales de ingresos.

¿Mejor autónomos o empleados?

Para concluir, la pregunta sería: ¿mejor ser freelance developer o programadores con un contrato en una empresa? La respuesta no es única y depende de las preferencias, de los estilos de vida y las prioridades de cada uno.

Los que prefieren la estabilidad y la rutina, aprecian la posibilidad de trabajar en equipo, prefieren tener ingresos regulares y terminar la jornada laboral después del horario de oficina se encontrarán cómodos como empleados en una empresa. Quien, por el contrario, da prioridad a la independencia, prefieren trabajar en autonomía y elige la flexibilidad, también con la condición de tener que dedicar tiempo extra al trabajo, está hecho para la carrera de freelance developer.